Por Iván Petrella
El poeta W. H. Auden decía que el objetivo de la educación es hacer del autoengaño una tarea más difícil. A principios de 2011, deberíamos seguir su lema. Es el momento de hacer una pausa en el trajín político y social y obligarnos a tomar una visión más panorámica de la realidad argentina. Debemos verla sin engaños, tal como es. Solo así sabremos dónde estamos parados y podremos enfrentar acertadamente los retos a futuro. ¿Qué vemos, entonces, si enfrentamos sin titubear la realidad del país?